The Solemnity of All Saints 2017
Revelation 7, 2-4, 9-14 + Psalm 24 + 1 John 3, 1-3 + Matthew 5, 1-12
November 1, 2017 at St Joseph Parish in Norman, Oklahoma
Today we sit at the feet of Jesus and listen to his instruction. As always,
Jesus is telling us something about God. These Beatitudes reveal our God to
us. They tell us what God is like and therefore, what how God-like people
live.
Hoy nos sentamos a los pies de Jesús y escuchamos sus instrucciones. Como
siempre, Jesús nos está diciendo algo acerca de Dios. Estas Bienaventuranzas
nos revelan a nuestro Dios. Nos dicen cómo es Dios y cómo le gusta a Dios
que vivan sus semejantes.
These holy people we remember today have one thing in common: their need.
This is a need for food for mercy, for peace, for happiness. All of these
things are different forms of needing God. Those who are blessed in this
life are people who know they need God. They know that they cannot go
through life or go into eternal life with God, and without God’s grace,
help, and peace.
Estas personas santas que recordamos hoy tienen una cosa en común:
“necesidad” . La necesidad de alimento para la misericordia, la paz, la
felicidad. Todas estas son formas diferentes de necesitar a Dios. Aquellos
que son bendecidos en esta vida son personas que saben que necesitan de
Dios. Ellos saben que no pueden ir por la vida o ir a la vida eterna sin la
gracia, la ayuda y la paz de Dios.
These “saints” are not called “Saint” because of their perfection. They are
saints because they knew that they needed God. They had failures and faith.
They were not super-human filled with grace and gifts, faith and virtues
that we lack. They fell and were picked up, sinned and were forgiven, forgot
the promises they made and they were reminded again. The saints we remember
today are part of us all.
Estos “santos” no son llamados “Santos” por su perfección. Son santos porque
sabían que necesitaban de Dios. Tuvieron fracasos y fe. No fueron súper
humanos solo estaban llenos de gracia y dones, fe y virtudes que nos
faltan. Cayeron y fueron recogidos, pecaron y fueron perdonados, olvidaron
las promesas que hicieron y se les recordaron nuevamente. Los santos que
recordamos hoy son parte de todos nosotros.
We are not saints because of our perfection, but the lack of perfection does
not keep us from becoming saints. We know that too often are not meek,
merciful, or peacemakers. We become saints because we know that we can never
become saints without God. Knowing out need for God and living that way is
what we must do. It is why we are here, and it is what will eventually get
us into the Kingdom of God.
No somos santos por nuestra perfección sin embargo la falta de perfección no
nos impide convertirnos en santos. Sabemos que con mucha frecuencia no somos
mansos, misericordiosos ni pacificadores. Nos convertimos en santos porque
sabemos que nunca podremos volvernos santos sin Dios. Saber la necesidad de
Dios y vivir de esa manera es lo que debemos hacer. Es por eso que estamos
aquí, y es lo que finalmente nos llevará al Reino de Dios.